Con el propósito de elaborar una normativa que integre medidas que ordenen las actividades que se realizan en los tiangues del país, la Comisión Agropecuaria recibió a representantes de la Asociación de Ganaderos de El Salvador (AGES) para escuchar sus necesidades y opiniones.
Saúl Milla, Alfredo Guerra y Javier Reyes, delegados de la entidad, expusieron a los legisladores los beneficios que le generaría el marco legal al sector ganadero.
Los tiangues, espacios donde se vende ganado, son regulados por el Código Municipal de la jurisdicción donde operen. Sin embargo, las actividades en las que se realizan dichas transacciones están desordenadas. Por ejemplo: no disponen de básculas adecuadas.
Al respecto, los legisladores buscan ordenar los procesos acordes a las leyes municipales y establecer una supervisión que especifique el tipo de animal, precio y otros detalles, así como todo lo concerniente a los permisos de traslado de semovientes. Este trabajo se realizaría en conjunto entre las alcaldías y el Ministerio de Agricultura.
El presidente de la Comisión de Agricultura, Ricardo Rivas, expuso que la iniciativa surgió a partir de la solicitud de diferentes representantes del sector ganadero.
Javier Reyes, de AGES, expuso la necesidad de trabajar en un normativa que regule el peso exacto del ganado al venderlo.
Además, mencionó que se deben controlar los precios, a fin de beneficiar al comprador y vendedor de ganado, pues hay casos en los que las ganancias de comercializar la carne se las llevan terceras personas y no los productores, quienes se han esforzado por criarlos.
«La realidad que tenemos en este momento debe cambiar. Los felicito por esta iniciativa, no podemos dar un paso atrás porque somos el único país de Centroamérica que no pesa el ganado», sostuvo Reyes.