Tomado de Hola!
Llorando, manchada de barro y con el corazón en un puño. La Reina ha vivido una jornada que no podrá olvidar nunca tras visitar, junto al Rey, una de las zonas más devastadas después de que la DANA arrasara todo a su paso el pasado martes, 29 de octubre: la localidad valenciana de Paiporta.
Después de recorrer el puesto de mando avanzado y conocer la última hora de las tareas de rescate y recuperación de suministros básicos tras las inundaciones, los Reyes han continuado su ruta. Un momento en el que, debido a la tensión acumulada tanto doña Letizia como don Felipe han demostrado temple y voluntad intentando calmar a los allí presentes.
Desde hace seis días, España está de luto. Tras la terrible catástrofe sucedida en la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Málaga, que deja por el momento 217 fallecidos, los Reyes han querido desplazarse a estas zonas para mostrar su apoyo y transmitirles su solidaridad, aunque la visita no ha salido como se esperaba.
Antes de abandonar Paiporta, los vecinos, cansados y tras perder sus bienes materiales y aún más importante, a sus familiares, han comenzado a gritar, a insultar y a lanzar objetos a la comitiva en la que también se encontraba el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón.