Las autoridades priorizan la prevención de riesgos y la atención oportuna ante emergencias como parte de su visión integral de seguridad y bienestar para la población salvadoreña.
En este contexto, se ha diseñado y puesto en marcha el Plan Nacional de Contingencia ante Terremotos, un instrumento estratégico que establece los protocolos y medidas a seguir para reducir los riesgos sísmicos.
Este plan busca garantizar que tanto las instituciones del Estado como la ciudadanía actúen de manera ordenada y efectiva en caso de un evento telúrico, destacó, hoy, el subdirector de @PROCIVILSV, Fermín Pérez. A través de este plan son coordinadas acciones preventivas que abarcan desde la capacitación hasta el desarrollo de simulacros masivos, fomentando la preparación de todos los sectores de la sociedad.
«Tenemos un Plan Nacional de Contingencia ante Terremotos, nuestro marco de referencia son los terremotos de 1986 y de 2001, también las condiciones que tenemos actualmente. Esto nos permite planificar los recursos a tener listos para poder intervenir. Trabajamos mucho en la reducción de riesgos, también en la preparación, y desarrollamos algunas actividades», subrayó. Añadió que este tipo de planes fortalecen la capacidad de respuesta, y generan conciencia sobre la importancia de estar listos ante cualquier eventualidad. La prevención, en este sentido, se convierte en una herramienta fundamental para salvar vidas y minimizar daños materiales.

«Del 13 al 17 de octubre vamos a conmemorar el terremoto de 1986, también las Naciones Unidas ha decretado que el 13 de octubre de cada año es el Día Internacional para la Reducción del Riesgo de Desastres», indicó.