Labubu: los muñecos peludos que se convirtieron en las musas más diminutas (y virales) de la moda

Foto tomada del X de: @nypost

Redacción Originales

Cada mañana, la diseñadora de modas Gina Alva despierta con decenas de pedidos para su marca de Los Ángeles, Glossy Gems. Entre sus productos más vendidos están una falda de tul azul cielo al estilo Carrie Bradshaw, una chaqueta tipo bouclé de tweed y un overol negro de sarga con detalles en cuadros vichy. Aunque su línea de moda tiene apenas unos meses de haberse lanzado, Alva ya está generando “una cantidad significativa” de ingresos con sus diseños y contenido en línea. “Así es como pago mi renta”, dice.

Pero la ropa que Alva diseña y publica en internet no es para personas. Es para Labubus.

Los Labubus son muñecos peludos con forma de elfo creados en 2015 por el artista hongkonés Kasing Lung. Fabricados por la marca china Pop Mart, y vienen con un aro para usarlos como llavero. Después de que Lisa, la estrella del K-pop, comenzara a llevarlos colgados en sus bolsos de diseñador en 2024, estos muñecos se convirtieron en accesorios de colección, exhibidos como si fueran joyas en bolsos y mochilas en todo el mundo.

Como ocurrió con los Beanie Babies en los años 90 o las cartas Pokémon en los 2000, los Labubus se coleccionan, intercambian y revenden. Los modelos poco comunes pueden alcanzar precios de miles de dólares. Además, se han vuelto una fuente de seguidores y de ingresos publicitarios para creadores de contenido como Sydney Morgan, una popular youtuber cuyo contenido sobre moda para Labubus acumula casi 100 millones de visualizaciones. “Cuando empecé a vestirlos con ropita diminuta, fue lo más tierno del mundo. Y las cifras de audiencia se dispararon”, cuenta a Yahoo.

El fenómeno ya ha captado la atención de diseñadores de moda reales. En el desfile de la marca callejera Pronounce en Milán, en enero de 2024, dos Labubus estuvieron sentados en primera fila con chaquetas y sudaderas hechas a medida por la firma. La joyería de alta gama Dayri, con sede en Medio Oriente, lanzó este verano collares de oro de 18 quilates con dijes en forma de Labubu.