Real Madrid mostró un esbozo de juego, se impuso a Salzburg

Redacción: LA NACION

No hubo sorpresas en la definición del grupo H del Mundial de ClubesReal Madrid mostró brochazos de la estructura que puede tener en la temporada que viene, pero sobre todo hizo valer su jerarquía individual para derrotar por 3 a 0 al austríaco Salzburg y clasificarse sin sufrir para los octavos de final, en los que se encontrará con Juventus, en todo un clásico del fútbol europeo.

Con la etapa de grupos concluida, ya ha quedado muy claro que los organizadores de esta Copa del Mundo tuvieron mucho más en cuenta las situaciones relacionadas con el show y el business que con el fútbol y el juego. Una de las tantas que se les escaparon es que al celebrarla al final de la temporada europea podía ser utilizada por los entrenadores como banco de pruebas pensando en lo que vendrá luego del verano en el hemisferio Norte antes que resultar un remedo de esos partidos de Copa de Europa jugados a cara de perro. Quizás cambie a partir de las series eliminatorias, pero es lo que ocurrió hasta ahora.

Quien más, quien menos, los directores técnicos fueron moviendo sus equipos en función de cansancios, lesiones, retos climáticos y necesidades en la tabla. Xabi Alonso, por supuesto, no fue una excepción. Real Madrid lo recibió con muchos agujeros por tapar: un año pobre en resultados y peor en juego, defectos notorios en el armado del plantel, futbolistas en muy bajo nivel o en plena despedida (Luka Modric, confirmado; Rodrygo, en duda) y algunos recién llegados para ir armando el rompecabezas. Y como si fuera poco, la gastroenteritis de Kylian Mbappé lo dejó sin su goleador en los tres partidos de la zona.