Redacción: Kelly Rissman
Según un informe, el gobierno de Trump planea imponer fuertes multas a los inmigrantes que se nieguen a abandonar Estados Unidos tras recibir una orden de deportación.
En un nuevo esfuerzo por llevar a cabo lo que el presidente Donald Trump ha calificado como la “mayor operación de deportación” en la historia de Estados Unidos, los inmigrantes que no abandonen el país tras recibir una orden de deportación podrían enfrentar multas de hasta $998 dólares por día, según se informa en documentos obtenidos por Reuters. En caso de incumplimiento, sus propiedades podrían ser embargadas, conforme se indica en los planes propuestos.
“Los inmigrantes indocumentados deben utilizar la aplicación CBP Home para autodeportarse y abandonar el país de inmediato. De no hacerlo, enfrentarán las consecuencias, incluyendo una multa de $998 dólares por cada día que permanezcan en territorio estadounidense tras recibir una orden final de deportación”, señaló un vocero del Departamento de Seguridad Nacional en declaraciones a The Independent. “La opción más segura para los inmigrantes indocumentados es autodeportarse”.
Los planes se basan en una ley federal de 1996 que establece que cualquier persona inmigrante sujeta a una “orden final de deportación” que “deliberadamente no abandone o se niegue a abandonar” Estados Unidos puede enfrentar una sanción civil de hasta $500 dólares por cada día de incumplimiento. Sin embargo, el gobierno sugirió aplicar las sanciones de forma retroactiva por un período máximo de cinco años, lo que podría resultar en multas superiores al millón de dólares, según declaró un alto funcionario del equipo de Trump al medio.
El informe se da a conocer una semana después de que el Departamento de Seguridad Nacional emitiera una advertencia a las personas inmigrantes en situación irregular, instándolas a “autodeportarse” antes de que la agencia las localice y proceda con su deportación. Quienes decidan autodeportarse conservan la posibilidad de ingresar legalmente a Estados Unidos en el futuro, mientras que quienes son deportados pierden ese derecho.
La advertencia también incluía la amenaza de una multa diaria de $998 dólares, además de sanciones que van de $1.000 a $5.000 dólares si la persona no se autodeporta tras haber declarado que lo haría, además del riesgo de ser enviada a prisión.