Por Liset Orellana
Ricky Martin es uno de los artistas latinos más importantes de los últimos años y eso quedó evidenciado y comprobado en su presentación en El Salvador en la noche del sábado en el Estadio Las Delicias, Distrito de Santa Tecla.
Un artista de talla internacional, con músicos experimentados y, por si fuera poco, con el talento de la Filarmónica Salvadoreña, el puertorriqueño se entregó al cien para sus fans en El Salvador que esperaron muchos años para reencontrarse.
Ricky Martin y su concierto sinfónico revivió los mejores temas que llevaron al boricua a la fama mundial. Con un escenario espectacular y con un ensamble junto a la directora de la Filarmónica, maestra Alejandra Funes Bustamante, el show fue de lujo.
Los timbales y las trompetas se fusionaron con los violines y un Ricky Martin consagrado con su carrera salió al escenario para interpretar Pégate, Volverás, La Bomba, Fuego de noche, Disparo al corazón y otros grandes éxitos.
La locura fue total y el estadio vibró con gritos y aplausos del público. Por supuesto, no pudieron faltar en este concierto Maria, La mordida, Living la vida loca, La Copa de la vida y aquellas que hieren el corazón como: Tal vez, Te extraño, Tu recuerdo, Vuelve y Asignatura pendiente.
Ricky, de 52 años, demostró su calidad interpretativa que combinó con una coreografía muy personal y particular. Con la promesa de «regresar muy pronto» el artista se despidió de tierras cuscatlecas.